miércoles, 4 de mayo de 2011

PRIMERO VINIERON A POR NOSOTROS/AS....(Introducción del autor)


Mucho se ha escrito ya del terror del holocausto, pero nada o casi nada sobre el horror que supuso para 300.000 personas con discapacidad. Estas personas, no solamente fueron torturadas y asesinadas, sino que, en una demostración sin parangón de crueldad y deshumanización, fueron utilizadas como cobayas humanas, antes de darlas la “solución final”.



En estas líneas voy a relatar el proceso mental que llevaba a esa gente a realizar tales actos de crueldad, como era ese procedimiento y las reminiscencias que hay en la actualidad de dichos procesos mentales.



Este libro, quiere ser un libro útil, no quiero contar una historia lacrimógena, quiero que no se repita. Yo no soy historiador, no pretendo dar datos y fechas solamente para relatar unos acontecimientos, sino que pretendo dar las claves psico-sociales de la filosofía que movió estas atrocidades, ver como se plasmó en una realidad y más tarde rascar en el barniz políticamente correcto y descubrir lo que podríamos llamar “micronacismos”, referencias sutiles a esta filosofía.



Para todo ello, este libro contará con cuatro bloques diferenciados:



En un primer bloque, encuadraré el tema dentro de la bioética y el biopoder. Se trata de ver como la ciencia biológica afecta a nuestras vidas, tanto a nivel ético, como a nivel político. Temas muy importantes y muy de actualidad como la eutanasia o la eugenesia, son los que serán enunciados en este bloque.



En un segundo bloque, pasaremos a ver como la perversión de estas materias, en pos de una determinada filosofía, también malinterpretada, puede dar lugar a una ideología política nefasta para la humanidad. También, veremos que técnicas de manipulación mental, unido a unas determinadas circunstancias socio-económicas, hacen que la población apoye algo que estando en pleno uso de su libre albedrío difícilmente aceptarían.



En un tercer bloque, abordaremos el lado más macabro, como hacer realidad la pasadilla realizada sobre el papel y dicha en discursos llenos de violencia. No pretendo recrearme en detalles morbosos y lacrimógenos, sino ver el procedimiento que seguían. En este bloque, solamente intento comprobar como cualquier locura puede llevarse a la práctica, tanto si esta locura es positiva, como si es la más horrenda e inhumana. En definitiva, comprobar como, el sueño de la razón genera monstruos.



En el tercer y último bloque, hablaré de cómo todo esto no es cosa del pasado, sino que en el presente hay determinadas actitudes que ocultan esta filosofía como base de su existencia. Aquí veremos como algunos comportamientos con las personas con discapacidad tienen como trasfondo el rechazo visceral a la discapacidad. Intentaré dilucidar si ese rechazo es generado por el miedo a verse reflejado en las personas con discapacidad, o por simple rechazo a las mismas por considerarlas molestas e incómoda para su vida.



La causa de escribir este libro es intentar sacar a la superficie una fobia de la que nadie ha hablado nunca, la fobia a las personas con discapacidad. Esta fobia es más complicada de reconocer, ya que se oculta el rechazo a la persona detrás del rechazo a la discapacidad, sin darse cuenta que ambas van unidas. Por otro lado, algunas personas con discapacidad, odian su propia discapacidad, no la aceptan. Eso, unido a lo anteriormente dicho, hace que la persona se llegue a rechazar a si misma.



A raíz de esto, se podrían acuñar dos conceptos:



- Micronacismos: Afirmaciones en las que, de forma sutil, se deja entrever una filosofía de exterminio, negación o aislamiento de un colectivo. Está precedido de una deshumanización de la persona, de tal manera que sea imposible verla como un igual.



En el caso de la discapacidad, como ya hemos dicho, esto se oculta bajo un supuesto odio a la discapacidad y no a la propia persona.



- Disfobia: Fobia a la discapacidad, por consiguiente, fobia a las personas con discapacidad. Esta fobia, aún no es del todo reconocida como tal, ya que se presenta en varias formas:



■La primera forma, sería bajo el concepto de rechazo a lo que socialmente supone la discapacidad. Esto es, lo que podríamos llamar “efecto espejo”.


■La segunda forma, sería directamente la de odio a las personas con discapacidad. Aquí, directamente se ve a las personas con discapacidad como un estorbo para la sociedad. Esto lleva a la deshumanización de estas personas y ello al deseo de eliminarlas o recluirlas.


■La tercera forma, sería bajo el nombre de compasión. Cuando nos compadecemos de alguien, no vemos a esa persona como un igual, sino como alguien que está por debajo. Al mismo tiempo, esto delata una forma de falta de autoestima por parte de la persona que siente compasión, ya que es una forma de sentirse bien consigo misma.


En definitiva, en la obra que sigue a continuación no pretendo hacer un relato de determinados sucesos, en determinado momento histórico. No pretendo decir que todo lo malo ha pasado, que vivimos en un mundo feliz. Muy al contrario, pretendo ser práctico, ver lo que queda de aquellos comportamientos y que los puede hacer aflorar en la actualidad.





Víctor Villar Epifanio

Tres de mayo de 2011